Un
viejo, español y su hijo llevaban un burro al mercado para venderlo. Iban padre
e hijo, a pie para que el animal llegara menos fatigado a la feria.
Al poco rato encontraron, unas mujeres, y una
de ellas dijo:
¡Miren qué hombres más tontos! Andan a pie
teniendo tan hermoso burro!
El viejo oyó estas palabras y mandó al hijo
que montara en el asno. Después de haber andado algún tiempo, pasaron cerca de
un grupo de ancianos que se mofaron, de la acción del mozo que iba montado
mientras que su padre iba a pie.
El viejo entonces hizo que se desmontara el
hijo, y subió él sobre el burro.
Más adelante hallaron un grupo de mujeres y
de muchachos que al verlos pasar dijeron:
¡Qué vergüenza de viejo! Muy cómodo en su
pollino mientras que el muchacho va a pie jadeante y cansado
El padre al oír esto hizo que el muchacho
montase, al anca y así montados los dos siguieron su camino.
Al buen viejo, le parecía que había
encontrado la manera de ir a gusto de todo el mundo, cuando un hombre que
pasaba gritó dirigiéndose al grupo
¿Cuál de los tres es el burro?
Sintióse el viejo muy mortificado con esta
pregunta burlona, y el otro la explicó diciendo que era una barbaridad cargar
de aquella manera a un animal tan pequeño y débil y les hizo ver al padre y al
hijo lo cansado que el burro estaba.
–Mejor sería que lo lleves cargado hasta el
pueblo próximo para evitar que se muera en el camino.
El viejo, creyó razonable esta observación y
entre él y su hijo buscaron un fuerte palo ataron al burro a él y tomando en
hombros una extremidad, el padre y otra, el hijo fueron trabajosamente cargados,
con la bestia con dirección al pueblo.
Pero entonces se fue, reuniendo alrededor de
ellos, como una procesión de gentes que se burlaban de las personas, llevando a
cuestas un burro.
Por fin al pasar por un puente, hizo un esfuerzo el burro para recobrar su libertad asustado por tanto alboroto, y cayó al agua y se ahogó.
Por querer complacer a todo el mundo perdió el pobre, viejo su asno. Es bueno, ser complaciente pero sin renunciar al sentido común. Anónimo
–¡El mundo al
revés!–gritaban en tono de mofa
Por fin al pasar por un puente, hizo un esfuerzo el burro para recobrar su libertad asustado por tanto alboroto, y cayó al agua y se ahogó.
Por querer complacer a todo el mundo perdió el pobre, viejo su asno. Es bueno, ser complaciente pero sin renunciar al sentido común. Anónimo
-Pollino
Asno joven y cerril.
Burro semental.
-Jadeante
-Que jadea
-Barbaridad
Acción o acto exagerado o excesivo
Cualidad de bárbaro.
-Mortificado
Dañar gravemente alguna parte del cuerpo.
-Recobrar
Volver a tomar o adquirir lo que
antes se tenía o poseía.
-Complacer
Dicho de una persona: Acceder a lo
que otra desea y puede serle útil o agradable
-Complaciente
Que complace o se complace.